Si usted tiene dolor crónico de espalda o cuello, puede tratarse de una Enfermedad Degenerativa del Disco. Esta condición degenerativa de la columna no es realmente una enfermedad. Se trata, más bien, del desgaste normal generado por el uso y el envejecimiento en la columna vertebral. Lamentablemente, a medida que envejecemos, nuestros discos intervertebrales (especie de almohadones entre los huesos de la columna) pierden su flexibilidad, elasticidad y amortiguación características. Cuando ésto sucede, se produce un cambio en los discos, que pasan de ser ágiles y flexibles (lo que permite el movimiento fluido), a un estado fuerte y rígido que limita el movimiento.
Las personas con Enfermedad Degenerativa del Disco, en general, presentan dolor de espalda o cuello. La EDD puede afectar a cualquier parte de la columna. El dolor ocurre, generalmente, en la zona donde existe un deterioro gradual de un disco.
La enfermedad degenerativa del disco (EDD) afecta, generalmente, a los mayores, aunque puede ocurrir en personas de 20 años.
Los síntomas más comunes son:
- Dolor al sentarse durante mucho tiempo, agacharse, levantar objetos o inclinarse
- Disminución del dolor al caminar o correr
- Disminución del dolor al cambiar de posición con frecuencia
- Disminución del dolor al acostarse
Es importante tratar el dolor de espalda y cuello adecuadamente. Es necesario buscar atención médica si el dolor persiste y solicitar atención inmediata si se tiene cualquiera de las señales de emergencia que figuran a continuación:
- el dolor empeora
- el dolor es discapacitante
- siente debilidad, dolor, entumecimiento u hormigueo en las piernas.
- pérdida de control vesical o intestinal