Si usted tuvo recientemente un accidente y está padeciendo dolor de cuello, puede tener un Latigazo Cervical.
Esta dolencia puede originarse por:
El Latigazo Cervical, aunque no es técnicamente un término médico, puede ser muy doloroso. Lo llamamos Latigazo Cervical, ya que, en un accidente, el cuello puede hacer las veces de un látigo, con movimientos de ida y vuelta, primero hacia atrás (hiperextensión) y luego hacia delante (hiperflexión). Los médicos llaman al Latigazo Cervical, esguince o tensión de cuello.
El Esguince Cervical es una lesión de los tejidos blandos del cuello y la espalda superior, que se produce cuando los músculos y ligamentos se extienden por la fuerza de un accidente. Irónicamente, es muy fácil hacerse daño en el cuello, a pesar de que éste está diseñado para moverse en muchas direcciones (y, en un accidente, por desgracia, así lo hace).
El síntoma clave de Latigazo Cervical es el dolor de cuello o espalda. El dolor puede comenzar de inmediato o se puede desarrollar pasado algunos días, semanas e, incluso, meses después del accidente. Algunas personas sólo tienen un poco de dolor.
Si usted tiene un Latigazo Cervical puede sentir:
El Latigazo puede ser leve inicialmente y, en un primer momento, puede que ni siquiera el paciente sepa que se encuentra lesionado. Sin embargo, un Latigazo Cervical puede causar síntomas cinco años después y, en el largo plazo, puede estar asociado con otros problemas, como Artrosis (dolor óseo y articular) y la degeneración del disco prematuro (más rápido envejecimiento de la columna vertebral).
Incluso si su dolor de cuello es sólo de intensidad leve, consulte a un médico tan pronto como sea posible. Afortunadamente, con el tiempo, la mayoría de las personas con Latigazo Cervical se recuperan totalmente.